martes, 26 de noviembre de 2019
sábado, 16 de noviembre de 2019
Clark se daba un baño en la ducha de la Watchtower cuando alguien entró sin ser detectado incluso por su superoído, era Diana que lentamente abrazaba al sorprendido hombre de acero que se dejaba acariciar por las aunque fuertes, delicadas manos de la amazona con sus fríos brazaletes, ella hizo una pausa para quitarse su armadura tricolor hasta quedar completamente desnuda frente al excitado kryptoniano que a pesar de ser un superpoderoso extranjero de un universo lejano, su erección no se pudo contener, Wonder Woman sonrió con picardía y se dispuso a darle placer a su Superhombre tan caliente, chupando suavemente su duro miembro viril mientras Clark jadeaba entre el agua de la ducha, ella lo masturbaba con fuerza y firmeza.
Clark había aprendido a controlar su fuerza y poder con el entrenamiento en su Fortaleza de la Soledad y acariciaba el largo cabello de la Amazona mientras empujaba sus caderas y trasero mientras ella también lo apretaba con ganas, el juego entre superhéroes sufrió un cambio, ahora era Superman besando y lamiendo con dulzura y a la vez con pasión la feminidad de Diana, ella jadeaba y chorreaba aunque su jugo se mezclaba con el agua donde los héroes se bañaban, el se puso de pie y WW se dejó penetrar por Clark mientras este empujaba primero despacio y luego más duro, mientras besaba el cuello y los enormes pechos de nuestra sensual diosa de Themiscira a su vez que agarraba sus nalgas, el la embestía hasta que la giró más rápido mientras ella se dejaba y disfrutaba sintiendo la virilidad de su hombre de acero cada vez más fuerte y rápido, así por bastante tiempo hasta que los dos coincidieron en un orgasmo de perfecta y húmeda sincronía en a su vez un sentimiento tan humano y mundano que concluyó en un apasionado beso entre estos dioses entre nosotros y entre el agua de la ducha de la Atalaya fuera de la atmósfera terrestre.